El Yoga combina disciplinas físicas y mentales que ayudan a alcanzar tranquilidad a nivel corporal y mental. Por ello, se considera un vehículo para controlar el estrés y la ansiedad. Practicar yoga de forma regular produce mayor cantidad de serotonina, una hormona que genera sensación de bienestar, satisfacción y relajación.
Físicamente nos reporta mejoras posturales, así como eliminación y/o prevención de lesiones, dolores de espalda y problemas respiratorios o digestivos. Mejora la concentración y la memoria ayudándonos a pensar con claridad.